lunes, 5 de noviembre de 2012

ACI Prensa publica Summa Daemoniaca, el libro más famoso del Padre Fortea


Continuando con los libros gratuitos del famoso exorcista español, P. José Antonio Fortea, ACIPrensa publica hoy el texto más famoso de este sacerdote: “Summa Daemoniaca”, un completo tratado sobre el demonio y el infierno.

Para esta ocasión, solicitamos al Padre Fortea unas líneas sobre su obra, que ahora reproducimos. En ellas el sacerdote explica de qué trata el libro, algunas de sus positivas repercusiones y su propia experiencia como autor del texto:

“Me han pedido unas palabras para la publicación online de Summa Daemoniaca en ACI Prensa. Por primera vez estará accesible en todo el mundo la obra mía que más difusión ha tenido.

Sinceramente, no llevo la cuenta de cuántas ediciones se han hecho. Entre otras cosas porque este título se ha publicado en varias lenguas. Pero han existido cinco versiones distintas del texto.

La versión de ACI Prensa será la última versión, la mejor. La que ya quedó fijada, más o menos, en el 2009. Hecha esta puntualización, paso a escribir (como me han pedido) unas líneas sobre el libro.

Summa Daemoniaca ese laberinto teológico, esa construcción de conceptos, un tímpano catedralicio con todo un infierno bajos los pies del Pantocrator. Summa Daemoniaca no es un tratado sobre el averno. Es un libro sobre todos los infiernos, un atlas donde se despliega la sorprendente variedad de la zoología demonológica, un recorrido católico por los parajes de las regiones de la oscuridad.

¿Resultado de todo esto? Un hombre que me escribe, a mí, su autor, diciendo que vio el libro sobre la mesa en una visita a su cuñada, y que lo pidió prestado tras hojearlo por curiosidad. Y que a mitad de su lectura, se confesó tras años de no hacerlo, y empezó a ir a misa todos los domingos. Cuando comprendí lo que era el infierno, me vino al corazón esta idea clara y nítida: no quiero ir al infierno, me dijo.

Otras veces era un jovencito de dieciséis años el que me escribía. No creía en la Iglesia, ni en los curas, pero la fascinación por la religión surgió en su corazón adolescente a través del recorrido por esos parajes de dolor.

Recuerdo un preso español de cuarenta años que me escribió una carta, en la que me explicaba que mi libro era el primero que leía en toda su vida.

Recuerdo la carta de un cartujo sugiriéndome con mucha humildad una anotación a una de las centenares de cuestiones. Tampoco olvidaré a una satanista de unos sesenta años que me vino a visitar. Me mostró su libro completamente subrayado y anotado.

Especialmente enternecedora fue la conversación con un joven sacerdote tentado de dejar su ministerio, que me telefoneó años después y sentenció: el libro me llegó cuando tenía que llegar.

La vida propia de Summa Daemoniaca ha sido sorprendente para mí, su autor. ¿Sobre cuántas vidas habrá influido? ¿Cuántos destinos habrá modificado en mayor o menor manera? ¿Qué se pensará entre los demonios acerca de la obra?

El Mal ¿Por qué Dios ha permitido el Mal? ¿Por qué existe todo un mundo de demonios? ¿Por qué junto a la felicidad infinita de Dios, existe todo un microcosmos de sufrimiento eterno? ¿Por qué la Creación tiene su perfecto reverso tenebroso? ¿Por qué la iniquidad de los ángeles caídos optó por llevar a la consumación su sufrimiento, por llegar hasta el final, por continuar más allá del punto de no retorno?

Todas estas preguntas intentaron ser respondidas en mi tratado a la luz de Dios. Quise escribir un libro sobre el demonio intentando escuchar la sutil voz del Espíritu Santo.

¿Me gusta mi libro? Sinceramente, no. Podría cantar la loa de mi obra durante muchas más páginas. Pero a mí no me gusta. Porque a estas alturas de mi vida, he comprendido que los infiernos demoniacos son más vastos, más profundos, de lo que creí en esa época.

Mi obra permanece porque no se han hallado errores. Ni yo he encontrado errores en ella, y soy su peor crítico. Ahora bien, es una obra que se queda tan lejos de expresar el horror del mal perfecto, consumado, eterno. Qué gran misterio”.

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